LA UNI

Estamos dirigidas al botox sin
remisión. La vanidad nos desborda. Somos esclavas de la apariencia, pero es lo
que elegimos. No somos capaces de rebelarnos a la tiranía del estar. Con las
palabras decimos que lo importante es el ser, los hechos dicen que es el estar.
Los sueños que el tener. Resulta que nos regimos, en definitiva, por lo onírico.
Todas lo sabemos, cuéntame o sálvame mamá.
Las clases son ásperas y
dolientes, los profesores no saben hacer interesante sus clases. La economía de
esfuerzo nos hace ser utilitaristas, conclusión final; aprendemos poco,
memorizamos mucho, olvidamos demasiado. La solución es el plan Bolonia, dicen
los que no saben dar clases interesantes. Pero tal y como dicen en otro artículo:
“lo mejor nunca es lo bueno”. Somos la generación desengañada; con 19 años y
pienso en lo que me queda, que pereza mamá.
CRISTINA LOPEZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario